Se cambia la ruta por el tiempo.
Encontraremos caminos embarrados y multitud de charcos;por lo cual la prevista la postergamos para mejor ocasión.
A las 8,30h nos vemos en las presillas y nos daremos una vuelta completita por la casa de campo.
Comentario y fotos
Esto se va convirtiendo en habitual para algunos:el pasar un Domingo pasado por agua en vez de quedarse en la cama con la excusa de que se está más calentito entre las sábanas que enfundado en mallas.
el Sábado nos las prometíamos más felices y eran numerosos los que se ofrecían a engrosar el grupo de valientes para la salida habitual;pero ya a primera hora,cuando se aproximaba la hora de salida,el wassap empezaba a emitir los pitidos que le caracterizan con los consabidos mensajes de:Lo siento pero me espera la familia a comer y tengo mucha prisa (¿Un Domingo?)y alguno más original con la tontá de que cumplía años una hija...los demás también tenemos que los cumplen y no lo decimos ¡y ya está!
El caso es que se rajaron y nos dejaron a tres que nos arriesgamos a cumplir con la sagrada tradición del pedaleo.
Eso sí,en vista que las previsiones meteorológicas nos fallaron de nuevo anunciando lluvias por todas las poblaciones menos en la comunidad de Madrid (¡Que casualidad!) decidimos cambiar la ruta y el itinerario para no sufrir en demasía,que lo cortés no quita lo valiente y tampoco es cuestión de masoquismo.
¡Casa de Campo pues! y que Dios reparta suerte pensamos,y la hubo si quitamos la rotura de cadena por causas desconocidas y una caída tonta por los frecuentes resbalones sufridos,y es que el terreno que encontramos era puro chocolate recién hecho,de ese barrillo por el que las ruedas resbalan como por aceite,eso si,muy divertidas las bajadas por trialeras y las subidas por las que 10 pedaladas equivalían a una vuelta de rueda.
A todo esto se dieron unas cuantas vueltas dentro de recinto,subiendo bajando y llaneando,hasta que nuestros cuerpos completamente calados y con principios de congelación dijeron
¡Basta! y decidimos volver por Aluche para casita.
Una parada obligatoria fue para que el GranJefe se tomara el refrigerio,otra para limpiar el exceso de barro de las burras en una fuente y la tercera para apañar la cadena rota.por lo demás nos salieron unos 46 km con los que nos cubrimos de gloria y algo más espeso llamado barro.eso sí aunque a alguno le entraron ganas,no arrancamos a llorar ninguno.
Pero uno se colgó directamente en el tendedero al llegar a casa y otro se dio una ducha con agua caliente con la bici y la ropa puesta;el tercero formó una pequeña playa en el recibidor de tanta arena que llevaba.Y las mujeres contentas que salgamos a hacer deporte para coger tono muscular y posiblemente un resfriado.
¡Fuerza y Honor! y otra más a nuestras espaldas,casta Fortubike.
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